Momentos

Pues me he puesto a recordar momentos de mi pasado mientras me llegaba al trabajo, como no, pero momentos desde la alegría, desde la felicidad que me inunda ultimamente, que no se a qué será debida, pero que esta ahí.

Recuerdo el plan a seguir, lo recuerdo con total claridad, un año a Irlanda a empezar a aprender un poquito de inglés y luego saltar el charco, pedir asilo en casa de Stephany y desde ahí, dejarme llevar, era facíl, conseguir un trabajo no me hubiera costado mucho, hacerme con ella, bueno, eso era cuestión de tiempo, o al menos eso creía. Ella era la motivación, ella era la meta. Pero.... Algo se torcío, como dicen los Cramberries, "Oh my life, is changing every days, in every possible way"

Así que abandoné el proyecto inicial al muy poco de llegar a Irlanda. Siguiendo las sagradas escrituras del cristianismo, por aquello de "no es bueno que el hombre esté solo" empezó un periplo de relacciones humanas sin par en mi vida. De entre todas y sobre todas ellas Mairead, y por ella todo esto de los recuerdos hoy, por aquel momento del "it´s my life" de Bon Jovi, sentado en la parte de atras de su coche, encabronado con ella, no se, ni me importa hoy por que, de hecho ni en su día supe bien por que, la diferencia entre lo que ella quisiera decir, y lo que yo pudiera entender, podia ser considerable. Pensando en ella otra vez más, y con el motor de mi inquietante pelota encendido, he empezado un recorrido mental desde el principio hasta hoy, de esas cosas que he vivido en materia sentimental, y me he encontrado frente a otro momento importante que ha definido mi existir hoy sobre todas las demás cosas, y a colación del recuerdo de Mairead, y ha sido el recordar el por qué y el cuando decidir cerrar las puertas de la muralla que llevo hoy a todos los sitios, el día que estando de vuelta de las tierras de Daniel O´connell, con el más amargo de mis llantos porque entendí que nunca volvería a ver a Mairead, decidí que jamas nunca y de ninguna de las formas, ni yo jugaría con los sentimientos de nadie, como hiciera con otras, ni por nadie volvería a pasar por el amargo camino que estaba recorriendo entonces. Y hasta el día de hoy, salvo algún pequeño escarceo (muy pocos), donde ni por asomo hubo nada parecido a un sentimiento, por ningúna de las partes, creo, y un error, lo llevo a bastante a rajatabla.

volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar, ains Becquer, quien sabe.